Los orígenes.

Raventós i Blanc es una de las familias vinícolas del mundo con más generaciones dedicadas a la viticultura en la misma granja, nada menos que veintiuno. Sólo hay otras cinco en el mundo que puedan presumir de lo mismo. Manuel Raventós Doménech en 1888 elaboraba el primer cupaje con tres variedades autóctonas: Macabeo, Xarel·lo y Parellada. Podríamos afirmar que era el primer champagne español y el nacimiento del cava. Sin duda una familia cargada de historia vinícola a sus espaldas.

Más de un siglo después, en el año 2012, Pepe Raventós y su padre deciden sin embargo salir de la DO Cava con la firme creencia de que es posible crear una denominación pequeña en su territorio, la zona del río Anoia. ¿Pero qué tiene esta zona de especial? Está claro que todos los ríos marcan las características geológicas de sus valles. La cuenca del río Anoia estuvo cubierta por el mar durante tres millones de años y al retirarse dejo al descubierto un valle de arcillas en las que el río había escarbado descubriendo suelos más viejos y una caliza con fósiles marítimos. Algo muy parecido a lo que podemos encontrar por ejemplo en Chablis y en algunas zonas del Loire y que otorga una mineralidad especial a los vinos que nacen en estos territorios.

En un lugar tan especial desde el punto de vista geológico es normal que Pepe Raventós se sienta profesionalmente más viticultor que enólogo, afirma con ilusión que a él le gusta definirse como “viticultor de la cuenca del río Anoia”. Sin embargo no siempre fue así. Su idea no era acabar en el mundo del vino. Su padre al principio tampoco lo quería y Pepe estuvo vinculado a proyectos sociales alejados del viñedo.  Finalmente se unió al proyecto familiar, estudió sumillería y un master en enología y comenzó así su propio proyecto vinícola.

El acercamiento a la biodinámica.

La viticultura biodinámica es el eje de este proyecto. Una manera de cuidar el viñedo que para Pepe Raventós no supone ninguna novedad o innovación, afirma que la esencia de este tipo de prácticas siempre ha existido porque se basa en un sentimiento de respeto a la naturaleza y en la creencia de que existe un organismo granja que está vivo. Seguramente esta filosofía tiene mucho que ver con los recuerdos su infancia, sobre todo aquellos ligados a la vida animal. Relata que tuvo la suerte de crecer entre vacas, conejos y gallinas en la casa que sus padres recuperaron en el Pirineo. Confiesa que en el colegio lo suyo no era el futbol y que lo que más deseaba era que llegará el fin de semana para ir a esta casa que intuimos ha inspirado su proyecto actual.

No tiene miedo de reconocer que ha cometido errores, pero por encima de todo defiende la importancia de poner en práctica cualquier idea que se tenga. Por eso siempre anima a intentarlo, a encontrar una idea que nos inspire, como la idea de la granja que es lo que le impulsó a creer en la biodinámica. No sabe decir aún qué es lo que exactamente aporta la viticultura biodinámica a sus vinos; puesto que todo es un conjunto de variables; pero sin duda es un método de trabajo que abre la puerta a un camino que a lo mejor si que aporta mucho al conjunto del sector.

Y si la infancia de Pepe ha influido en su decisión de trabajar en biodinámico,  conocer a Didier Dagueneau, productor de culto de Pouilly-Fumé fallecido repentinamente en 2008, es su inspiración para crear vinos como Mas Serral. Dagueneau era un autodidacta, un productor atípico del Loire cuyo vino Silex, de una marcada mineralidad, siempre ha llamado la atención de Pepe Raventós. Por eso le hace especial ilusión presentar en Pamplona este espumoso en el que el protagonista es este suelo de la cuenca del río Anoia por encima de la variedad.

Su amor a los animales y la naturaleza fue en definitiva lo que le llevo a pasar tiempo en la viña y a entender que la naturaleza debes ser el protagonista para crear vinos de interés mundial. Vinos que trascienden a la persona que lo hace, que viajan en la geografía y en el tiempo, que capten la atención de los locos del vino. –“Sobra vino en el mundo y lo primero que hay que hacer es escoger quién quieres ser”-Si vas a costes seguramente no hagas biodinámica ni seas un artesano de la viticultura, ni te ciñas a producciones limitadas. –“Si quieres hacer vinos de interés mundial, tienes que escoger”-.

 

Irene Guede Arboniés
La Chica de la Garnacha