Si os hablamos de José María Martinez Alonso seguramente no os venga nadie a la mente pero si decimos Pepe Beiro la cosa cambia. La primera pregunta que surge es el porqué de este nombre. Y la respuesta es simple, O Beiro es el nombre del pueblo donde nacieron sus padres, el que dio nombre al negocio familiar y por el que se conocía a su padre y actualmente también a su hijo.
Pepe Beiro nació en el mundo del vino, se crió en el mundo del vino y como el mismo dice su ilusión es morir con una copa de vino en la mano. Sus abuelos ya elaboraban vino en Ribeiro. En una añada de excedencia y buena calidad, el abuelo materno de Pepe Beiro no consideró justo lo que le pagaban por la uva y su yerno, el padre de Pepe, tomó la iniciativa y decidió vender él mismo el vino a Santiago de Compostela. Se afianzaba así una saga de comerciantes y buenos conocedores del vino gallego.
En los años 60 Pepe Beiro ya elaboraba en Ribeiro junto a su familia con la idea de cuidar la calidad y buscar algo que gustará a la gente. Su pasión por el vino le llevó en el año 1988 a montar una vinoteca mítica en Santiago, O Beiro, una de las primeras de España. La vinoteca era innovadora, no sólo por la cantidad de referencias, sino también porque ofrecían la oportunidad de probar por copas antes de comprar o incluso descorchar una botella en local. El hijo de Pepe siguió dirigiendo la vinoteca que cerró sus puertas el martes 13 de Octubre de 2015 , eso sí, sin dejar de existir como proyecto familiar que probablemente vuelva a ver la luz en un futuro cercano con una nueva visión y en un nuevo emplazamiento.
Actualmente Pepe Beiro dedica su tiempo a promocionar y dar a conocer los productos gallegos lo que le lleva a viajar por todo el mundo y a colaborar en diferentes eventos vinícolas. Particularmente los orujos y licores es algo que Pepe lleva dentro desde su más tierna infancia cuando ayudaba a su madre a elaborar orujo de hierbas y licor café. En los años 70 Pepe comenzó su particular investigación y elaboración de orujos. A día de hoy confiesa que posee más de 180 recetas diferentes para la elaboración de orujos y licores, algunos tan originales como el licor de pimiento de Padrón o el licor de tomate.
Su pasión y respeto por este producto le ha llevado de una forma casi desinteresada a recorrer y predicar sobre el orujo y licor gallego allí donde haya alguien dispuesto a escucharle. Nos relata que existe una falta de conocimiento y un maltrato hacia los orujos y licores gallegos. Estas joyas parecen haber caído en un saco roto con multitud de productos que no pueden compararse ni en calidad ni en origen. Esta realidad lleva a Pepe a viajar de la mano del Consello Regulador de Aguardientes e Licores Tradicionais de Galicia para dar a conocer la verdad. La diferencia entre un orujo o licor con denominación de origen gallego no tiene nada que ver con cualquier otro producto que se vende como tal. Existen muchos orujos industriales o caseros sin etiqueta o que provienen de destilerias de gran volumen que no poseen las características organolépticas de una materia prima seleccionada y una destilación cuidada.
Como hemos podido comprobar en la cata que ha impartido, hay una elegancia y equilibrio en este tipo de producto muy diferenciador. Aromas mucho más sutiles y menos alcohólicos tanto en nariz como en boca. Incluso a veces simplemente con la densidad, es posible diferenciar un orujo de calidad con denominación de origen, de otros que no los son.
En definitiva, Pepe Beiro es un maestro lleno de conocimientos y pasión, un incansable defensor de los productos de calidad. Gracias a él hemos aprendido a tratar a los orujos y licores gallegos como se merecen y a transmitir mejor lo que son, no sólo una bebida, sino también historia, tradiciones y en definitiva el alma de una región. Nos confiesa que si pudiera elegir su última copa sería un buen orujo envejecido en barrica. Esperamos que tarde muchos años en hacerlo y nos siga deslumbrando con su sabiduría y amor por el buen vino.
Irene Guede Arboniés
La Chica de la Garnacha